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Los peores bancos de España (o dónde NO depositar tu dinero)


El primero de la lista es La Caixa, no vamos a descubrir nada nuevo con ello ahora. Pero si miramos los informes y nos preocupamos en repasar las denuncias de algunas de las organizaciones de consumidores de España, podremos más o menos descubrir qué bancos tratan peor a sus clientes.

Uno de los casos en los cuales se hace evidente este maltrato es precisamente en las llamadas Cláusulas Suelo, ante las cuales la Unión Europea ha calificado de ilegales y, por lo tanto, los clientes tienen derecho a reclamar a su banco. El problema viene por la cantidad de trabas y complicaciones que los bancos se sacan de la manga y se inventan para que no puedas hacerlo.

¿Son más inseguros los navegadores antiguos, o los nuevos?



Volvemos al tema de los navegadores. Como ya contamos hace poco, últimamente están bloqueando la mayoría de navegadores antiguos por ser inseguros, los sitios web de todo tipo prefieren que uses las últimas versiones de navegadores web porque, dicen, te aseguran una mejor navegación. ¿Es eso cierto? Claro que no. Y vamos a verlo bastante claro con un ejemplo.

Hace poco recibo un e-mail de tipo pishing en el correo. Se me pedía que accediera a un sitio de Caixa Bank para confirmar mi cuenta. Gmail, que es muy listo, había enviado el correo a spam. Tras abrirlo, me voy a mi viejo navegador web, el Navigator en su versión pre-Firefox, en concreto el Netscape Communicator 4.51 de, nada menos, 1999. Como si fuera un señor totalmente inocente, que no haya actualizado su ordenador ni su navegador y que se fíe de los correos de ese tipo, decido coger la dirección del sitio de delincuencia que se hace pasar por La Caixa, y la introduzco en la barra de direcciones de Navigator. ¿Qué pensáis que ocurre? ¿Que acude a la página web tranquilamente? ¿Que se conecta y me entran todo tipo de troyanos y gusanos?

¿Tus datos personales valen o no valen? Valen justo doce millones de euros


Cuando hablamos de Big Data empresarial muchos nos imaginamos grandes centros de datos de proveedores de Internet en sitios como Silicon Valley o similares. Nada más lejos de la realidad. De hecho, nos atañe bastante como consumidores a ti y a mí. También, cuando hablamos de Google y sus servicios, pensamos que esta compañía es muy altruista porque "todo lo da gratis" (es cierto que antes esos servicios eran pagando, y bastante), creemos que no ganan demasiado por los datos que tú y yo ponemos en sus buscadores, en nuestros perfiles de usuario en Facebook o en Twitter, y en demás sitios personales.

Pero una muestra de lo alejados que estamos de la realidad nos la ha traído hoy la actualidad. En 2014 vio la luz en Alemania Zeotap, una compañía que se dedica a eso: al Big Data. Zeotap es una compañía que no negocia con productos físicos, no tiene industrias, ni fábricas, ni comercio, y aún así genera muchísimos beneficios. ¿Con qué trabajan, pues? Pues negocian con tus datos personales.

Pila dummy (o pilas simuladas)


Probablemente recordéis mis problemas para enfriar el ordenador, y la necesidad de recurrir a un ventilador externo. Como el ventilador es de tres pilas (tamaño AA, de 1,5 voltios, 4,5 voltios en total) su potencia me sobraba y malgastaba bastantes pilas, así que, uniendo con un cable de cobre uno de los alojamientos de esas pilas (para cerrar el circuito eléctrico) conseguí que funcionase con solo dos pilas (3 voltios), de esta forma ahorraba una pila por uso.

El caso es que el cable de cobre, aunque funcionaba perfectamente, era bastante complicado de manejar, y cuando cambiaba de pilas tenía que tener bastante cuidado en que no se desprendiese. Pensé que tenía que existir algún tipo de pila ya fabricada "cortocircuitada", es decir: con los polos positivo y negativo unidos entre sí, de manera que pasase corriente entre ellos libremente.

La hora de la hora: ¿Son caros los Casio?


Noelia Casarrubia-. Muy buenas a todos, estamos aquí una vez más en el programa "La hora de la hora", y como es habitual nos acompaña Byron Smith, con el que vamos a compartir un rato de amena charla, centrados en el mundo de la relojería, y centrados en concreto, como bien sabéis, en el mundo de Casio.

Muy buenas, Byron.

Byron Smith-. Hola, muy buenas Noelia.

Noelia Casarrubia-. Vamos a tratar un tema hoy que es un poco controvertido, confiamos en que no molestemos a nadie, ni que nuestros oyentes se sientan alarmados tampoco. Vamos a hablar sobre los precios de los relojes de Casio. Porque de un tiempo a esta parte se dice que los relojes de Casio son muy caros.

Byron Smith-. Sí. Te voy a comentar una anécdota que me ocurrió hace poco tiempo. En una relojería de barrio, que no tiene modelos de G-Shock, son todo de Collection, veo un modelo muy bonito, de Collection insisto, que costaba 55 euros. En un primer momento creí - cosa rara - que fuera un G-Shock en oferta, concretamente un DW-5500, por su tamaño. Pero cual fue mi sorpresa cuando me acerco y veo que realmente era un B650. Un reloj que tiene un módulo que no ofrece más de lo que ofrece el F-91, y que es calcado al que tiene el W-215, se vende a 55 €. Me llamó muchísimo la atención.

Prueba: monedero RMN (R. Monzo)


No soy de los que lleven billetera consigo (salvo casos excepcionales), ni tarjetero (salvo en determinadas ocasiones en las que vaya a necesitarlas), de hecho, no suelo llevar ni dinero, por lo que un monedero es algo que pasa a segundo plano entre mis necesidades de complementos. Así que con uno de "los chinos", o algunos que tengo guardados de cuando los regalaban con un producto de detergente, tengo más que suficiente.

El problema es que los de "los chinos" no duran ni dos veranos, y suelen desgastarse muy pronto y/o deteriorarse, presentando roturas en el delicado forro interior. Además, estos monederos compactos, que son -bajo mi punto de vista- los más útiles, suelen venir con un broche a un lado, que es sumamente incómodo el trabajar con él (siempre tengo en dudas si poner en ese sitio los céntimos, o las monedas más pesadas). Hace unos días, mientras caminaba por la calle con una compañera, al abrir el broche saltaron las monedas por los aires y os podéis imaginar "el escándalo", así que harto de esos "embustes chinos" he decidido traeros (y probar) un monedero de más calidad, que a un precio bastante competitivo (en torno a los 3 €) nos encontramos con una gran variedad de colores. Se trata de los monederos de R. Monzo, hechos en España.

El engaño de los cartuchos de tinta de Prink


A pesar de que prefiero el formato electrónico a veces tengo que imprimir sin remedio, por lo que, como seguramente todos vosotros, tarde o temprano tenemos que enfrentarnos al dilema y terrible desembolso del cambio de tinta. Cada vez que imprimo o reemplazo tinta a mi impresora Epson me entra una terrible angustia, y hecho de menos aquella fiable HP de los noventa, una vieja impresora que imprimía de todo con cualquier tipo de cartucho y que incluso podías "engañarla", de manera que si necesitabas imprimir y no te quedaba tinta de un color, la forzabas a usar otro. Esta Epson ni muchísimo menos, en cuanto nota que un cartucho está bajo de tinta ya no te imprime, sale un mensaje para que llames a su servicio técnico y comprar desde allí más cartuchos. Increíble.

Mi añorada HP fue "jubilada" porque, con la desaparición de los puertos paralelos para impresora, ya no era posible instalarla en un puerto USB (sí, hay cables compatibles que transforman puertos de impresora paralelos en puertos serie USB, pero no os los recomiendo ya que suelen dar muchísimos problemas).

Cómo hacer que la gasolina de tu encendedor dure más



Con los tiempos que corren y lo que está pasando con la energía, no está la cosa para desperdiciar combustible, precisamente. Así que cualquier truco que nos ayude a ahorrar será sin duda una buenísima noticia. Este es, de entre todos los que conozco respecto a los encendedores de gasolina, el que mejor he notado que funciona (lo he comprobado por mí mismo), y el de más fácil aplicación -en cierta forma, al menos-, ya que no debemos modificar el encendedor para nada.

Y es que uno de los defectos que más nos trae de cabeza a los usuarios de encendedores de nafta o de gasolina, es la poca duración de las recargas. Teniendo en cuenta que la latita de gasolina de tan sólo 125 ml. nos sale a 3 euros (a unos 6 si la adquirimos online), es fácil suponer que, si usamos el encendedor habitualmente, en un año habremos pagado de sobra el encendedor a base de gasolina.

Por todo ello es esencial que vigilemos muy mucho uno de los elementos que más producen ese gasto: su evaporación.

Todo un móvil con cámara, radio, linterna y Bluetooth por casi lo que cuesta un F-91


¡Atención! Este post tiene una actualización más reciente aquí.

Me crecen los enanos. A mis problemas de ordenador se vino a unir ahora los problemas con mi móvil. Y es que mi viejo Nokia hace un poco "lo que le parece": cuando entra una llamada se apaga a veces, en otras ocasiones lo tienes un rato en el bolsillo, o lo dejas encendido sobre una mesa, y cuando vas a por él lo encuentras apagado, sin conexión... La gota que colmó el vaso fue cuando esta pasada semana fui testigo de un accidente y tuve que esperar a que me llamase la policía. Resulta que llegué a casa y, cuando me dio por mirar el móvil... ¡éste de nuevo apagado!

No es solo eso, por su culpa a veces vivo situaciones un tanto desagradables, como cuando me llama alguien y el teléfono se auto-apaga. Al interlocutor le da la sensación de que rechacé su llamada, que por supuesto no es así, dejándome en un muy mal lugar.

La tecnología excluyente



Cada vez me encuentro más con este tipo de páginas como la que veis en la imagen de entrada a este post. Páginas que te bloquean su contenido hasta que no instales la última versión de uno de sus navegadores. Y no vale con que sea un navegador específicamente - como si no hubiera más -, sino que, encima, tiene que ser "la última versión". Versiones de navegadores que, encima, solo funcionan con determinados sistemas operativos.

Si algún día - que nunca lo fue, en realidad -, Internet fue libre, accesible y para todos, resulta más que evidente que ya no lo es. Internet se ha vuelto un "garito" donde los más privilegiados y que cuentan con más medios se ven favorecidos y pueden disfrutar (y utilizar) todo su contenido, y las pesonas más humildes y de los escalafones sociales más bajos, con ordenadores antiguos y/o menos potentes, se quedan sin poder acceder a un gran número de páginas, incluso de la Administración.

El ejemplo de los encendedores piezoeléctricos


Aunque ahora no esté bien visto y marcas como Casio casi ni lo mencionen al contar su historia "oficial", ya sabéis que los japoneses hermanos Kashio empezaron a obtener el capital necesario para sufragar los gastos de los inventos que vendrían después, fabricando productos para fumadores. Durante los años ochenta, en el que las multinacionales del tabaco obtenían ingentes cantidades de dinero en forma de beneficios, -fumar seguía siendo la norma, socialmente aceptada e incluso favorecida y animada-, Casio continuaba ofreciendo artículos para fumadores, y dado que presumía de ser -y lo era- una compañía tecnológicamente puntera, ofrecía esos artículos también recurriendo a lo último en tecnología de la época. Y un ejemplo de esto lo eran los encendedores piezoeléctricos.

La presencia en el mercado actual de este tipo de encendedores -tecnológicamente más avanzados- es, sin embargo, casi testimonial. Los encendedores piezoeléctricos no tenían una piedra para chispas que sustituir, por lo tanto podrían funcionar casi ilimitadamente -en la práctica no es así, claro-. Pero el principal problema era otro: aparte de ser al principio más caros, su combustible -el gas- sí había que sustituirlo. Y cuando acababas ese gas, la mayoría acababan tirando a la basura el encendedor entero, porque son tan baratos que un encendedor genérico actual no compensa recargarlo.

Crónica de hace doce meses atrás



4 de abril de 2020
Aún se nota ese efecto pegajoso del alcohol sobre el reloj, por lo que dejo más tiempo a que se evapore. Las autoridades han decretado un cese total de movimientos con excepciones muy limitadas, lo que se ha dado en llamar "confinamiento". Los partes de guerra describiendo el avance sin tregua de la pandemia se suceden por todo el mundo. Los ciudadanos se pasan el tiempo escuchando las noticias por la radio, pegados a la televisión, o navegando angustiosamente por Internet en busca de algún dato esperanzador. Trump asegura que Estados Unidos no superará las doscientas mil víctimas, y que si ese número fuese más allá - cosa poco probable, asegura -, sería una auténtica catástrofe. Veremos si sus "profecías" de loco de pabellón de alta seguridad en psiquiatría se cumplen (1).

Según los expertos en salud, lo único que tenemos para protegernos es "el lavado constante de manos", la distancia "de seguridad", y desinfectar objetos con lejía o alcohol. Esas recomendaciones se convierten en un mantra. Me dice una chica que cuida a un anciano que el señor está tan obsesionado que, aunque no sale de casa, no deja de lavarse las manos con jabón, desesperado. Tiene el lavabo con una gruesa costra de jabón reseco de los restos que le caen por aplicarse tanto jabón, que le cuesta un mundo luego retirar. Las mascarillas, aseguran desde la OMS, no son necesarias. "Tranquilidad", nos dicen, "el virus no se transmite por el aire". Al parecer no hay prueba científica de que el virus sea capaz de "moverse" en suspensión, lo que se conoce como contagio por aerosoles(2). Sólo lo hace por superficies, donde puede estar latente "durante días". Esa duración es incierta: pueden ser días, semanas... Otros hablan de meses. En la tele una enfermera nos enseña entonces cómo desinfectar con lejía los pasamanos, los interruptores de la luz, y las manecillas de las puertas. Es el caos absoluto. Y yo sin lejía. Me queda solo media botella de la que uso para fregar el suelo.

Comparativa calculadora Casio HS-4ER frente a la fx-82 Classwiz


Si hay una calculadora de Casio a la que le tengo un gran aprecio y cariño, ésta es la Casio HS-4ER. Por otra parte, sé que esta es una comparativa injusta totalmente, ya sabemos que los modelos gráficos de las nuevas calculadoras Classwiz como esta fx-82 les dan mil vueltas a calculadoras del pasado, ¡mucho más a una calculadora sencilla como la HS-4ER! Pero no es ahí donde quiero llegar, sino a dejar en evidencia cuanto ha avanzado y mejorado Casio en esto de las calculadoras y, por supuesto, también a mostrar la curiosidad y en cierta forma lo entretenido que es profundizar en modelos tan dispares y ponerlos uno frente al otro.

Una de las cosas que más nos llaman la atención de la pequeña calculadora Casio HS-4ER es su ligereza. Lógicamente se necesita muy poco para una calculadora tan sencilla: solamente un simple circuito electrónico y un LCD con una capacidad de ocho dígitos. Que no es tanto pero que cumple perfectamente el cometido para el que ha sido fabricada y diseñada.

Llamada a filas



Los más jóvenes puede que no entiendan muy bien toda aquella problemática pero los que ya tengan una edad recordarán con bastante nostalgia (y probablemente mucho temor) una de las etapas más inquietantes y repelentes por las que tenía que pasar todo varón español en edad de merecer: la llamada a filas. Es decir, su incorporación a "la mili". Servir a la patria (bonita palabra para abusar de ti cuanto quieran, por cierto).

No me voy a meter en camisas de once varas con este tema, solo diré que hasta que en los noventa no llegó el PP para liberarnos de aquella gilipollez, cada año miles y miles de reclutas veían sus nombres, apellidos y DNI (sí, lo de la privacidad se lo pasaban por el forro en aquellos tiempos) publicados en todos los panfletos y periódicos para acudir a su centro de reclutamiento. En mi caso, recuerdo muy bien cuando llegué una mañana a casa desde el trabajo, y me encontré a mi padre con el periódico sobre la mesa, consultando con inusitado interés el listado para ver si aparecía mi nombre.

¿Quién maneja nuestras marcas preferidas?


Cuando nos vienen a la memoria marcas como Paredes, Kelme o Crube, tendemos a imaginarnos a nuestros recuerdos de niños con ellas, a nuestra infanca, y a personas que han vivido la historia de la marca desde hace muchos años, que prácticamente de forma constante las han lucido, llevado y usado con orgullo. Pero no, nada más lejos de la realidad.

Toda esa imagen, que se encargan muy bien de publicitar y destacar esas mismas firmas, recurriendo a valores como "retro", "calidad", "duradero", "histórico" (e incluso "mítico", en el caso de Paredes, casi nada...), es simplemente eso: imagen. Una cortina de humo. Puro escaparate. Normalmente los dueños de esas marcas solo se dedican a contar las ganancias y a cuantificar ventas, de todo lo demás hace tiempo que "pasaron del tema". Detrás de esas marcas se esconden empresas de marketing y de imagen, que se encargan de que te creas lo que no son mas que ficticias realidades en tu imaginación, que se dedican al cacareado "social branding" y similar, en aras de hacerte creer que son las marcas de toda la vida. Las mismas que conociste en tu infancia e incluso las mismas que conocieron tus padres. Pero no.

Cómo la presión ha llevado a que un producto cambie de nombre


No suele ser habitual, pero a veces ocurre. El nombre de un modelo de cualquier producto, pero sobre todo de un coche, suele ser algo muy importante, en el que se invierte mucho dinero y medios, porque tiene que identificar perfectamente lo que ese producto quiere transmitir. Pero cuando esto no sale tan bien, y el nombre lleva a problemas, el fabricante (o la marca que lo comercializa) suele resistirse a cambiarlo.

Pero otras veces la marca obra con lógica y, aunque tarde, hay que reconocerle a Kia su mérito. El fabricante coreano tenía como uno de sus modelos más famosos y exitosos del segmento C (utilitarios por encima de los compactos medios) el Kia cee'd. Este curioso y "molesto" nombre era un quebradero de cabeza constante: a veces se escribía como Cee'd, otras como C'eed, y otras como ceed. Desde hace tiempo algunos decidimos nombrarlo con la lógica más razonable y que debería haber sido la que tendría que haber elegido Kia al traerlo a Europa: "Ceed".

Prueba: bolígrafo Faber-Castell Poly Ball, un simplón "ballpoint pen" vestido de plata barata


Faber-Castell es una compañía de gran prestigio y es, además, una firma de rancio abolengo. El nombre proviene de familias nobles alemanas, que aún mantienen el control de la empresa. Sus útiles de escritura tienen todos ellos una gran calidad, incluso desde las gamas más bajas, lo sé por propia experiencia porque he probado varios de sus artículos, aunque en lápices no son precisamente mi debilidad, pero sí he de reconocer, aunque sus precios sean un poco más elevados que en el resto -aquí más que nada es cierto lo de que pagas la marca- que suelen ir acompañados de una gran calidad. Por lo tanto cuando compras sus productos, aunque sepas y notes que estás pagando algo más de dinero por ellos, también sabes que vas a obtener una calidad más alta, superior a la media, tanto de escritura, de en útiles de pintura, de dibujo... En todos los artículos en los que trabajan y de todas las temáticas en las que están presentes.

A esto hay que unir que sus productos de madera, como los lápices, suelen estar hechos a partir de bosques controlados por ellos mismos, por lo que es una madera que tiene garantizada su sostenibilidad, algo que no pueden decir otras muchas marcas.

Gente honesta



Hace tiempo decidí regalar el patinete clásico al que le habíamos hecho una prueba en el blog, a un chico que le hacía mucha ilusión. Cuando lo estuvo usando, y tras comprobar que ese tipo de vehículos de movilidad no iban con él, decidió devolvérnoslo. Admitió que no eran lo que pensaba y que se había llevado unos buenos sustos al usarlo así que, como no quería seguir tentando a la suerte y terminar rompiéndose la crisma, prefirió deshacerse de él y no dejarlo aparcado adornando en una esquina.

Me han resultado muy gratificantes su sinceridad y desprendimiento, porque era un elemento al que le tenía muchas ganas y bien podría, si hubiese querido, guardarlo "para admirar". Pero no, decidió que alguien pudiera seguir dándole uso.

Los coches de hoy alimentarán los talleres del mañana


Hace algunos años Audatex, compañía especializada en consultoría y reparaciones del automóvil, emitía un informe que a muchos en el sector de la automoción sentó como una bomba: los coches que más se estropeaban eran "los nuevos", los coches en torno a los cinco años, mientras que, a pesar del envejecimiento del parque automovilístico español, los coches viejos eran los que soportaban la crisis (debido a que muchos los poseían personas con pocos recursos) y, curiosamente, también eran los que aguantaban el temporal como unos campeones, con reparaciones menores.

Y es que a diferencia de los modelos actuales, los coches antiguos se pueden "remendar", y repararlos no suponía para el taller ni complejo software OBD (con carísimas terminales que cuestan miles de euros) ni herramientas rebuscadas ni procedimientos. Reparar un coche antiguo tardaba un taller un cuarto del tiempo que tardaban en repararle una avería similar a uno nuevo.

Xiaomi Mijia, el patinete eléctrico que -dicen- es como un Tesla


Cada vez se están poniendo más de moda los llamados patines y patinetes eléctricos, en muchos casos como juguetes para niños pero, en otros, nos los quieren vender como un competitivo producto para nuestro transporte cotidiano.

En Youtube hay cientos de presentaciones para este tipo de productos, pero la que más me ha llamado la atención, por la cantidad de incorrecciones y sus esperpénticos razonamientos para defender estos "vehículos", ha sido la del usuario "Vicesat" (la podéis ver al final de este post).