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La guerra "de fases" ha empezado


Lo que más temía el Gobierno que sucediese, ha ocurrido. El diseño de la llamada "desescalada" ha terminado por enfrentar a las autonomías, distinguiéndolas entre "aprobados" y "suspensos", entre "privilegiados" y "castigados". A fin de cuentas, el diseño se basaba en eso: en otorgar privilegios, y las comunidades autónomas que no han podido acceder a ellos se han sentido, en cierta manera, desprestigiadas o desilusionadas. Solo Cataluña (que ya admitió con notable sinceridad que no podría salir de su actual Fase 0) y en cierta medida Castilla-La Mancha (muy castigada por la pandemia) han asumido con cierta resignación su situación.

Sin embargo, Andalucía, y también la Comunidad Valenciana, han amenazado con guerra, enfrentándose al ejecutivo central y reclamando un revisión de urgencia de la documentación que han enviado. No quieren ni esperar a la próxima semana, quieren pasar a Fase 1 ya. Madrid ya envió documentación "deprisa y corriendo" y, como el Ejecutivo no la deja pasar a la Fase 1, ellos han organizado su propio "desfase" encubierto: abrirán parques, regalarán mascarillas para que la gente las use cuando salga, y peatonalizarán calles. Resulta curioso que lo hagan, cuando en teoría sus ciudadanos apenas pueden salir de casa, pero es evidente que tratan de, solapadamente, inculcar su propia visión y su propio ritmo de desescalada, a espaldas del Gobierno central.

¿Cuales son las fases de la desescalada en España? ¿Qué nos espera en la Fase 1?


La llamada "desescalada", "desescalado" o "desconfinamiento" (o "etapa de transición", para otros) trae de cabeza a no pocos ciudadanos estos días. El Gobierno ha dividido cada proceso en fases, las cuales son 4, aunque de ellas solo se conocen las medidas pormenorizadas en la fase 0 y en la 1. Pero para "transitar" entre dichas fases, se debe antes cumplir una serie de requisitos, que se han dado en llamar "marcadores", con el fin de asegurar que la situación epidemiológica y sanitaria del territorio que quiere aspirar a la siguiente fase es la correcta.

Estos marcadores son, entre otros:

-Sistemas de alerta precoz y vigilancia epidemiológica.
-Identificación y contención rápida de fuentes de contagio.
-Capacidad de aislamiento y control de las fuentes de contagio confirmadas y potenciales.
-Atención Primaria.
-Asistencia Hospitalaria.

Sobre el particular no hay un procedimiento fijo. Por ejemplo, hace pocos días, el Ministerio de Sanidad hizo el mandato público de que quien desee pasar a otra fase, deberá ser capaz de tener resultados de tests, en atención primaria, en 24 horas.

Del des-confinamiento al des-control solo hay un paso


Sin orden ni concierto, este gobierno nos ha llevado de meternos todos en casa como si fuésemos delincuentes, a salir a la calle sin control. Y es que el horario que han impuesto para esta "primera fase" -como ellos la llaman- de la "desescalada" o "transición hacia una nueva normalidad" para salir a pasear es de risa, lo lógico habría sido "por la mañana los adultos, por la tarde los niños", pero al parecer este gobierno de lógica tiene muy poco. Olvidan demasiado a menudo, ahogándose entre sus propias leyes, manuales y reuniones interminables, que el sentido común y la simplicidad suele ser la mejor receta y, además, la que más entiende y llega al ciudadano. Pero no, se empeñan una y mil veces en retahílas interminables de normas, imposiciones, indicaciones y prohibiciones hasta el nunca acabar. A este paso acabarán haciendo bueno a Vox, lo cual ya es mucho decir. A veces pareciera que hacen las cosas sin pensar, y que no hay nadie pilotando la nave. Decía en la rueda de prensa el ministro: "no tenemos una guía", y añadía: "esta es nuestra guía". Ya veis. La frase del día.

En fin, ¿tienen guía o no? Supongo, claro, que todos pensamos que lo haríamos mejor, yo desde luego no (y tampoco me pagan para ello la abultadísima nómina que a ellos sí les pagan, por cierto), pero eso no es desescalada ni es nada. Decia una amiga esta tarde que aqui el centro esta a tope de gente por la calles, con sus niños, con sus perros, con su familia, con sus bicis, con sus patinetes, con sus juguetes..., que parece día de fiesta. Lógico. ¿qué esperaban?, es totalmente comprensible, y la culpa de lo que ocurra -incluyendo un repunte de la pandemia- será total y absolutamente del gobierno y del descontrol completo y total que llevan.. Ya lo hemos visto con la norma sobre los niños, saliendo por la tarde de ser brutalmente restrictivos, para luego desdecirse y dejar a todos los pequeños "campar a sus anchas" de nueve a nueve. Inconcebible. Terrorífico. No hay nadie a los mandos, esa es la realidad, esa es la sensación que nos da, lo cual nos hace tener un miedo tremendo.

El interrogante ruso


Sí, ya sabemos que es un país, pero uno no tiene muy claro qué tipo de régimen político posee. Desde que llegara al poder el ex-espía del KGB Vladimir Putin, nadie ha podido sacarle de él. De facto Rusia funciona como una dictadura, una forma de "comunismo-capitalista" tras el estrepitoso fracaso del comunismo y la necesidad de entrada de divisas. O dicho de otra forma: comunismo para el pueblo (que sufre una gran pobreza), capitalismo para la clase dirigente (que se sumerge en la opulencia). Tal vez es ahí a donde el comunismo realmente quería llegar y a donde lleva, se puede ver en China, Cuba y en Corea del Norte, todos regímenes "comunistas" donde los dirigentes explotan a las clases obreras, que viven esclavizadas y sin apenas derechos.

Por eso llama mucho la atención que un país como Rusia, en donde la población civil sufre enormes carencias y un gran número de sus ciudadanos vive en la pobreza, el gobierno se permita el lujo de presentar lo que -según ellos- es el armamento más avanzado y sofisticado del mundo.

Economía de escala (o por qué las bombillas que fabricamos aquí se venden en China)


Tengo un amigo que posee un taller, en el cual se dedica a la construcción y montaje de diferentes elementos arquitectónicos para servir de decoración y utilería. Él siempre defiende los productos de origen español y a los proveedores españoles, e intenta adquirir las piezas que él no puede construir, así como las piezas accesorias, siempre en proveedores regionales y, de no ser posible, en proveedores nacionales. De esta forma intenta proteger no solamente el producto español, sino el trabajo hecho por mano nacional.

Pero hace unas semanas, mientras conversábamos me decía que estaba intentando encontrar unas piezas para uno de sus modelos que no encontraba por ningún sitio, y que él creía que quizá incluso ni se producirían cosas como la que buscaba. Me comentaba que estaba sopesando el producir esas piezas él mismo, aunque eso le fuese mucho más caro. Las piezas que él pensaba producir serían de aluminio y para ello tendría que adquirir grandes listones de ese metal. Luego, a otro proveedor, encargarle cortarlos a determinadas medidas y con determinadas formas, y hacer finalmente él mismo la terminación y el acabado.

Un futuro sin relojes de cuarzo


Un alto ejecutivo de la Lockheed le desveló en cierta ocasión a un periodista que los Estados Unidos disponían de tan alta tecnología que en muchos aspectos se encontraban al menos veinte años por delante de la tecnología que se encuentra en la calle.

Hay un hecho muy llamativo: desde el proyecto de exploración Mercury al Programa Apolo se dio un paso muy importante que cualquiera que haya visto las misiones espaciales de aquellos años no tardará en darse cuenta. El Proyecto Mercury tenía, en la sala de control, instrumentación analógica. Era curioso ver el gran panel de control en donde, sobre un mapa-mundi, se habían instalado "circulitos" brillantes que se iluminaban conforme avanzaban las fases de cada misión. Los distintos parámetros biológicos de los astronautas se visualizaban mediante unos indicadores de rodillo, en los cuales se encontraba grabada una escala gráfica mientras que una aguja permanecía inmóvil en la posición central, y era el mencionado rodillo el que se desplazaba arriba o abajo para indicar los distintos cambios de estado.