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El problema de ser un monopolio


En teoría el capitalismo iba a aportarnos enormes beneficios: la extinción de los monopolios, el aumento de competitividad (con lo cual se ofrecerían productos no solo más baratos, sino más variados y de más calidad). Esa era parte de la teoría en el mundo ideal creado en la imaginación de los gestores financieros que en su día a todos nos vendieron. En el mundo real la cosa cambia radicalmente, y aunque en su ideario el capitalismo luche contra los monopolios, la realidad es que los incentiva. En el fondo, a fin de cuentas, el capitalismo no deja de ser un monopolio en sí mismo: el monopolio del dinero. Y aquél que posea más dinero-poder, domina sobre los demás.

Esto, que parece así dicho algo muy abstracto, se puede ver muy patente con un ejemplo.

Productos con abusivos márgenes de beneficio


A veces cuando adquirimos artículos al por menor somos conscientes, y asumimos, que tenemos que pagar un precio ligeramente más alto, que le pone el minorista para su propio beneficio. Aunque ese precio suele ser elevado si tenemos en cuenta el porcentaje de intermediarios, normalmente no lo es escandalosamente, pero hay artículos donde sí podemos darnos cuenta del enorme beneficio que obtiene un minorista.Y uno de esos artículos son los fósforos o, como se las conoce comúnmente, las cerillas.

Habitualmente suelo llevar conmigo una caja de cerillas de las pequeñas, de las más pequeñas, que solía adquirir en el supermercado. Pero recordé que, hace ya muchos años, en los tiempos en donde fumar era la moda y si no lo hacías casi que uno era "el bicho raro", la excepción, se comercializaban para los fumadores que preferían cerillas unos modelos de las cajas pequeñas con distintos motivos. La verdad es que eran cajas muy bonitas, que se podían incluso coleccionar, y algunas con estética que recordaban a las de los sellos. Decidí acercarme a algunos estancos a preguntar, ya que, suponía, una caja de cerillas de las más pequeñas no deberían ser caras.

Mi "kit compacto de supervivencia"


Siempre he convivido muy de cerca con las calles de la ciudad, los extrarradios, y a veces por placer, otras por necesidad, tuve que moverme de un sitio a otro recorriendo bastantes kilómetros. No es nada singular, no es nada extraño, muchas personas lo hacen a diario (e incluso distancias más grandes) trasladándose en coche. La diferencia es que los escenarios que suelo visitar y por los que solía transitar eran tan variados, que te obligaba a tener que llevar unas veces algunas cosas contigo y, otras, elementos distintos.

Además, si uno se traslada en auto, en autobús, o con mochila, no tiene el mismo problema y puede llevar consigo casi "de todo", lo que pueda necesitar o lo que pueda requerir. Pero en mi caso muchas veces no ocurría eso, tenía que irme "con lo puesto" y metía en el bolsillo "cualquier elemento útil" que me parecía conveniente.

Así se hacían las cerillas en 1898



Me ha llamado la atención este grabado de una fábrica de fósforos, allá por el año 1898, antes de que la automatización llegara para acabar con este tipo de manufacturas, y aún antes de que estos fósforos (o cerillas) casi quedasen relegadas al olvido. En aquellos tiempos, sin embargo, era un bien básico y muy importante, no solo para encender los omnipresentes cigarrillos y pipas, sino para encender estufas, cocinas y demás.

En el grabado vemos a dos señores sentados en sendos bancos, cortando en tiras pequeñas piezas de madera. Junto a ellas están amontonadas una serie de pilas que son de las que luego saldrían los "palitos" de las cerillas. A un lado vemos un botijo, bajo una mesa de pared auxiliar. Detrás de ellos parece que una persona está terminando (o embalando) las cerillas, para el proceso final de ensamblaje de la cabeza.

Comparativa entre fósforos de Selex y fósforos de Tres Estrellas


Soy una de esas pocas personas que deben quedar que aún utiliza fósforos, comúnmente conocidos como cerillas, y como muchos sabréis llevo desde hace tiempo teniendo una guerra constante con la marca de mayor difusión en España: "Tres Estrellas".

Desde que desapareciera Fósforos del Pirineo y Swedish Match se hiciera con el control de la antigua Fosforera Española, el mercado de este producto deja muchísimo que desear. Aprovechándose de su posición dominante en el mercado, "Tres Estrellas " nos vende unos fósforos malísimos, carísimos, y el consumidor no tiene otra opción que comprárselos. Si vas a un estanco, encontrarás "Tres Estrellas"; en los supermercados, en Mercadona, en Carrefour... En casi todas partes la única marca que encuentras y que, por tanto, es la única que puedes comprar, es "Tres Estrellas ".

¿Trae a cuenta usar un encendedor Zippo? ¿Qué alternativas hay?


Si usas habitualmente un encendedor de gasolina de Zippo, te habrás dado cuenta en seguida que es terriblemente caro mantenerlo. Personalmente no es que lo use intensivamente, pero sí recurro a encendedores a diario y, cuando decido usar el Zippo, se nota en el gasto. He podido comprobar que, cada dos meses aproximadamente, tengo que cambiar la mecha, y ese es el tiempo que dura más o menos la lata de combustible. Lo único que dura bastante más son las piedras, que pueden estar sin agotarse cuatro meses o incluso más.

Haciendo un simple cálculo, encontramos que cada cuatro meses uno ha gastado en su Zippo la friolera de unos 25 €. Digo "friolera" porque estamos hablando de un simple encendedor, no de una motocicleta de competición. Dependiendo dónde adquiramos el combustible (en algunos sitios la lata se vende a 5 euros o más, y como Zippo no fija precios y le deja a cada vendedor que ponga el que quiera, podemos acabar pagando la gasolina o nafta para el Zippo a precio de oro), si usamos el encendedor intensivamente, el gasto se dispara de una manera abrumadora.

Así que hemos decidido comentar las alternativas existentes.

Prueba de la estufa de parafina Tectro R 233 TC


Cuando uno se pone a buscar una estufa, en el mercado encuentra multitud de soluciones, variantes y marcas que puede converir esa búsqueda en una tarea ardua y complicada. Sin embargo, en su esencia y a la hora de la verdad, todas ellas se podrían dividir en dos grandes grupos: por el tipo de combustible o energía utilizada, y por el tipo de calor o forma de generar éste.

En lo que a combustible respecta, tenemos las estufas que usan gas (que pueden ser a su vez radiantes, de llama azul o catalíticas), las que usan pellets, y las que usan parafina o queroseno (es lo mismo). Por otro lado, tenemos las estufas u hornillos eléctricos, o los calefactores. Este tipo de elementos calefactores generadores de calor no queman combustible, sino que funcionan mediante una resistencia que se calienta a alta temperatura, y cuya energía la obtiene de la corriente eléctrica. A pesar de que su calor es casi inmediato, limpio y seco, su efíciencia energética es muy escasa (tardan mucho en calentar lugares grandes o ambientes muy fríos) y, además, son muy caras (la factura de electricidad por kilowatio hora no compensa). Solo son aptas y recomendables para calentar algo muy esporádicamente, y por un corto espacio de tiempo, nada más.

Por qué no hay que comprar productos de multinacionales


El aterrizaje a Nestlé del multimillonario inversionista Dan Loeb es una buena ocasión para recordar cómo operan este tipo de compañías. Reduciéndolo a lo más básico, y para que todos nos entendamos, cuando adquieres un producto, por ejemplo un chocolate Cibeles, sabes más o menos a dónde se dirige tu dinero y a manos de quién va, y lo mismo ocurre con otras marcas, como Zahor. Aunque por desgracia eso es lo menos habitual y antes, con fábricas como La Herminia (en alimentación) o IKE (en textil, con camisas que eran famosas por su durabilidad) era más fácil saber en qué invertían nuestro dinero: en su producto.

Sin embargo, cuando adquirimos un artículo a una multinacional (Nestlé, Coca-Cola, Adidas, Reebok, y podría continuar casi hasta el infinito) nuestro dinero acaba en unos dividendos que se reparten multimillonarios inversores que, por lo general, se esconden tras firmas de inversión, y cuyo principal fin es repartirse los beneficios. La mayoría ni sienten la firma, y muchos de ellos ni siquiera saben qué fabrican, solamente les interesan los cheques que llegan a su nombre.

Muestra de perfume en la revista Glamour


Como ya he puesto aquí, uso un frasquito de muestra de colonia para mi kit de diario. Aunque en perfumerías a veces se pueden encontrar (como explicaba Guti, antiguamente podían adquirirse también sueltos), puede que por cuestiones geográficas os resulte más complicado haceros con uno. Por eso os puede ser útil saber que en el último número de la revista Glamour, correspondiente al mes de abril, obsequian uno de estos frasquitos de perfume. A mí me la han regalado ayer (bueno, de hecho la chica me ha regalado hasta la revista, tras haberla leído), y la verdad es que está bastante bien.

El frasquito corresponde a una promoción dentro de la campaña de lanzamiento de Escada en su variedad de edición limitada Fiesta Carioca, un perfume muy fresco, veraniego, con mucha presencia de fragancias cítricas pero que huele realmente bien. Viene en un frasco "de los alargados" (no cabe en una caja de cerillas, tenedlo en cuenta) con capacidad para 1,5 ml (lo que sería una o dos dosis, más o menos, una cantidad que nos daría de sobra para higienizar las manos y algún objeto) con un tapón bastante sólido.

Comparativa: sistemas de seguridad para niños en los encendedores BIC y Cricket


Una de las primeras cosas que hago cuando compro un encendedor es retirarle el "child resistant", es un elemento que odio y que me molesta enormemente cuando me pongo a usarlo. No estoy en contra de él, vaya esto por delante, me parece un necesario y valioso elemento de seguridad, pero entorpece enormemente el uso cómodo del encendedor y, por eso, los fabricantes podrían dar la opción, al menos, de retirarlo para según qué casos.

Por eso, creo que sería interesante hacer una comparativa con dos de los fabricantes que ofrecen este tipo de dispositivos en sus encendedores, que son la francesa BIC, y la sueca Cricket (la española Clipper ha rehusado participar).