Tanto en el calzado, como en el vestir, yo intento ser lo más austero posible, y me esfuerzo por confomarme con lo mínimo necesario. Pero entre ese mínimo también tiene que haber cierta lógica, obviamente, porque la sobriedad no tiene que estar reñida con la comodidad.
Aunque intento mantener el máximo tiempo posible el calzado, y mi tipo preferido son las zapatillas, intento tener dos modelos siempre de quita y pon, como recomiendan los expertos, para darle tiempo al calzado a recuperarse. De esta manera no solo nos evitaremos problemas a futuro en los pies sino que, además, el calzado nos durará más tiempo en mejores condiciones.