El coche. Ese vehículo por el que no pocos empeñan su vida, se meten en créditos que no pueden pagar, y se desviven y pierden el sueño. El coche, ese invento que se ha convertido en uno de los principales productos de nuestro país, y por el cual se abren autopistas, se inauguran circuitos, se difunden programas de radio y televisión, y cientos de blogs y publicaciones web.
El coche, ese invento sin el que muchos no pueden vivir. Prefieren perder a sus hijos, un brazo o una pierna, que perder su coche. Y, en ocasiones, así ocurre. Literalmente.