Cuando fui a adquirir mis últimas gafas, pedí junto con el filtro UV (no sé por qué tienes que pedirlo, se supone que todas deberían llevarlo de fábrica) el de luz azul. Es un filtro que se ha puesto muy de moda en las ópticas, tanto para gafas de sol como para gafas de ver, o sea, las "normales". La cuestión es que ese filtro, (que aunque tergiversa mínimamente los colores, es recomendado por todos los ópticos "del planeta"), tiene un coste bastante elevado. Tanto que decidí prescindir de él y no ponérselo.
Los cristales que llevan filtro de luz azul se reconocen a simple vista de una manera bastante sencilla: basta inclinarlos un poco hasta que emitan reflejo, y entre esos reflejos suele encontrarse uno característico azul intenso. Ese es el filtro.
El caso es que, como quería unas gafas de filtro de luz azul, al final en lugar de pagarle a la óptica me fui al mundo laboral. En ese campo los filtros de luz azul hace mucho tiempo que se ofrecen (y también otros muchos filtros, por cierto), y acabé adquiriendo unas gafas de marca - de una buena marca, de las mejores del sector, que no diré el nombre para no regalarles publicidad - por menos de 20 €. Los cristales incorporaban no solo filtro de luz azul, sino filtro ultravioleta. Esas gafas se usan mucho en el mundo laboral para personas que tienen que estar al aire libre (marineros, leñadores...), y también para gente que, en factorías, pasan muchas jornadas ante múltiples monitores.
Claro que eso ocurre en el entorno profesional, sin embargo, en el día a día, ¿de verdad necesitamos un filtro de luz azul? Pues no. En el fondo todo parece señalar que esto no es más que otra de esas argucias de las ópticas (y ya llevan unas cuantas) para sacarnos los cuartos. Se dice que el filtro de luz azul es útil para quienes usan mucho el móvil, pero realmente cualquier actividad al aire libre, aunque no usemos el móvil, hace que los ojos reciban más luz azul que si estuviésemos ante un smartphone. Ni siquiera son últiles esos filtros para conciliar el sueño, más bien al contrario, son beneficiosos. Entonces, ¿a qué tanta historia y tanta manía con los filtros de luces azules, o los filtros cálidos? En el mundo de los smartphone es, básicamente, por dos cosas: ahorrar batería - porque la pantalla es uno de los componentes de los móviles que más energía consume, y hoy día, no lo olvidemos, todo el smarpthone es una pantalla, básicamente - y para hacernos visualizar colores cálidos que, como si fuera una fogata, "supuestamente" nos debería ayudar a conciliar el sueño. Pero esto no tiene por qué ser así, es solamente subjetivo.
Es hilarante hasta qué extremos nos pervierte el marketing, la publicidad y las campañas de marcas y ópticas para vendernos cosas a sobreprecios excesivos que ni necesitamos, ni nos resultan útiles y, encima, como en el caso del filtro de luz azul, son molestas y deforman los colores de los objetos que vemos. El problema es el de siempre, que para quien no lo sepa, o esté desinformado, el óptico, en la mayoría de ocasiones, sin reparo ni remordimiento alguno, "se la colará" al inocente cliente solo con el fin de sacarle más pasta. Indignante.
| Redacción: esRevistas.com / esRevistas.blogspot.com
El tema de las ópticas ya lo habéis comentado en varias ocasiones. Creo que se aprovechan del miedo o el respeto que nos da la salud. Nos dicen por 20€ más tienes no se qué, y nos convencen.
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