Ventajas de un patín eléctrico

En algunas reviews de patines eléctricos me sorprendía que su autor dijera que este tipo de vehículos había sustituido a la bicicleta en sus desplazamientos diarios. Dependiendo del recorrido, puede que así fuera, pero tampoco hay que negar lo evidente: con una bici, aún sin ser eléctrica, una bici digamos "convencional", de las de toda la vida, llegarás más rápido y más lejos que con un patín o scooter eléctrico. Ahora bien: no llegarás ni tan descansado, ni tan cómodo, eso es obvio.

Lo que sí puedo confesar es que, en lo particular, y tras varias semanas usando el patín eléctrico de Brigmton, puedo decir que sí ha sustituido (al menos en gran parte) a mi bici. El anterior recorrido de unos siete u ocho kilómetros que hacía antes (más o menos llano), lo hago ahora mucho más cómodamente en el patín eléctrico. No llegas a casa agotado, y disfrutas mejor y más cómodamente del paisaje.




Si haces una distancia más o menos "digna" (en torno a los diez kilómetros) con uno de estos patines olvídate de ir rápido o agotarás la batería y te quedarás colgado en mitad del trayecto. Lo mismo si afrontas pendientes. Una pendiente de un par de metros al 10% o 15%, bueno, digamos que no hay problema, pero si es más larga mi recomendación es que te bajes y la superes a pie. Estos vehículos tan frugales y ágiles están hechos para tomarse las cosas tranquilamente, y en trazados más o menos llanos. Si cumples estas sencillas premisas podrán llevarte y traerte con seguridad en distancias "respetablemente" largas.

Tras esta introducción, y dado que en este post nos íbamos a centrar en sus virtudes, vamos con ellas:

- No hay transmisión.
En una moto la transmisión es un aspecto muy importante. La cadena hay que tensarla cada ciertos kilómetros, engrasarla y cambiarla. No hablemos ya del aceite de las cajas de cambios o los mismos engranajes de la transmisión. En una bici, cadenas y platos necesitan continuas revisiones, y en un coche la línea de transmisión, aparte de su mantenimiento, requiere un accionamiento continuo si es manual.

En un patín eléctrico el motor es la transmisión. Situado en la rueda delantera, no hay ningún sistema de engranajes ni de desmultiplicación. Dado el elevado par motor (que además obtienes al instante), la tracción eléctrica no requiere cambios. Con una sola marcha tienes todas las velocidades que quieras, puedes ir rápido o despacio sin tener que hacer engorrosos cambios como los de una bici, coche o moto.

- Simplicidad del sistema de frenado.
Hemos dicho que la tracción es eléctrica, y que esa es una de sus virtudes, pero también el frenado es eléctrico. Cuando dejas de pulsar el acelerador (o sales del modo automático), el freno motor entra en funcionamiento y aminora la marcha, esto se nota, ¡y vaya si se nota! Además, es un freno gradual, que te permite aminorar la marcha con seguridad.

Si en según qué casos necesitas un frenado más repentino o brusco, tienes el freno de disco mecánico en la rueda trasera. Su frenado es más efectivo y te permite detener el patín eléctrico mucho antes.

Lo mejor de todo es que, cuando empieces a coger práctica con el frenado eléctrico, el freno de disco casi ni lo usarás. Previendo la detención o con una conducción preventiva, podrás usar el freno eléctrico para anticipar la reducción de velocidad. En la mayoría de salidas acabarás sin usar casi el freno de disco.

- Fácil transporte.
Es lo que dice todo el mundo, pero es verdad. En un segundo pliegas el patín, lo coges en tu mano y te lo llevas. Lo puedes meter contigo en un ascensor. Luego, elevas el manillar y ya lo tienes listo para funcionar de nuevo.

- Fácil repostaje.
En unas tres horas, el patín eléctrico se recarga. Más o menos lo que tardas en recargar el teléfono móvil. Y tras ello, de nuevo listo para la acción. Además, todo esto lo puedes realizar con un enchufe estándar.

- Nunca pinchas.
Aunque el Brigmton BMI-365 te viene con ruedas inflables (que pueden pinchar), puedes adquirir ruedas macizas y olvidarte de los pinchazos para siempre. Eso sí que es una delicia.


Estos son algunos de sus, diría yo, principales virtudes. Por supuesto, hay inconvenientes o "molestias" que también debemos tener en cuenta. Resumiré unas cuantas.

- No lo puedes usar con lluvia.
Por el momento, la mayoría de patines eléctricos no se pueden usar si está lloviendo.

- Tienes que habituarte a la posición.
Para hacer giros con seguridad, manejarlo, aprovechar el freno eléctrico, y no cansarte de pie en largos desplazamientos, tienes que tener cierta experiencia. Tal vez dentro de poco hagamos un post al respecto.

- Ruedas que tienden a reventar.
El motor eléctrico calienta mucho, así que si usas ruedas no macizas (con cámara de aire) puedes sufrir reventones en ellas. Cuidado con eso. Además, para recargarlo tienes que dejar el motor eléctrico enfriar, ¡y no toques la rueda delantera si ha estado mucho rato en funcionamiento el patín!

- Display de difícil visión.
En tiempo nublado o con sombras, el display LED se ve más o menos bien, pero con tiempo soleado habría sido mejor un display tipo LCD. No obstante lo importante (el estado de la batería) siempre se suele ver bien, ya que sus LEDs son muy potentes.

Últimos consejos.
El patín eléctrico es un genial invento y muy útil si, como todo, conocemos sus limitaciones y lo usamos con un poco de sentido común. No es un coche de Fórmula 1, ni una moto, ni una bicicleta. Es un tipo de transporte alternativo, para ir tranquilo y relajado. Si es eso lo que buscas, y tus paseos o desplazamientos no son demasiado exigentes, entonces este tipo de transporte seguro que te satisface. De lo contrario, pues coge el bus, el tren, ¡o usa tus piernas!

| Redacción: Duraderos.cc / Duraderos.blogspot.com