Descubrí los encendedores de Champ cuando me encontré con la burrada que pedían por un Zippo, entonces me di cuenta que había alternativas mucho más asequibles y de una gran calidad, que nada tenían que envidiar a los elitistas de Zippo. Incluso compartiendo el mismo diseño y piezas (al contrario que Star, por ejemplo, que tienen diseño y piezas distintas).
Como muchas firmas de este tipo, el fabricante Champ originalmente era austríaco - aunque llegaron a fabricarse en Francia, e incluso en Japón y Corea -, pero hace tiempo que - como suele ser por desgracia muy habitual en este tipo de productos - desapareció. Hoy se fabrican, convenientemente remarcados (y con la misma tipografía de marca, aunque obviamente sin la referencia a su origen europeo) por factorías asiáticas.
Así, los Champ pueden considerarse en un término medio entre los baratos TriStar (que rondan el euro) y los Star (que rondan los cinco euros). Frente a los 40 del precio básico de un Zippo, y más de 50 que muchas variantes suelen costar, la diferencia obviamente es abismal.
No obstante, su difusión es muy limitada, y son relativamente difíciles de encontrar, existiendo en variantes cromadas, o con recubrimiento en negro. El modelo con recubrimiento en negro, al contrario que en Zippo, no tiene un sobrecoste y, además, va pintada incluso la bisagra, cosa que en los Zippo no ocurre (dándoles a estos un aspecto más pobre y desangelado).
Los Champ son, por tanto, una gran alternativa. Llevo meses usando uno, y estoy muy satisfecho con él, de hecho no tiene nada que envidiar a un Zippo e incluso diría que le supera en algunas cosas (como en el aislamiento del depósito). Tanto es así que lo utilizo también en mis novelas, cuando el protagonista requiere un encendedor o hago alguna referencia a él.
Actualmente podríamos decir que existen, pues, cuatro tipos de encendedores a gasolina en el mercado: Zippo, hechos en Estados Unidos, y los asiáticos de Champ - con marca de Austria -, y los netamente chinos - con marca propia - de Star y de TriStar. Los dos primeros son "diseño Zip", y los dos últimos son "diseños Star". A ellos habría que añadir los IMCO, que aunque también han dejado de ser europeos, hay fabricantes chinos que continúan haciéndolos (y en una gran variedad de acabados).
Antiguamente, cuando el vicio malsano de fumar estaba de moda (cosa que por fortuna ahora no), existían marcas muy valiosas de encendedores de gasolina, algunas de ellas con "diseño Zippo" también. Una de las de más calidad eran los japoneses de Penguin, cuyos encendedores llegaron a tener fama mundial.
Al final de este reportaje podéis ver unos someros ejemplos de algunos de sus modelos más representativos, tanto de Champ (los originales) como de Penguin (también originales).
- Champ edición especial Marlboro años 90 (puede apreciarse la característica silicona de la cubierta de los Champ, en lugar del fieltro que llevan los Zippo).
- Champ austríaco original de la II Guerra Mundial. Además del quemador pivotante (para poder encender pipas), se aprecia claramente los dos remaches con los que iba enclaustrada la bisagra, que la hacían mucho más duradera. Hoy esa pieza es simple estética (dos círculos grabados), y en los actuales la bisagra va soldada, no posee remache alguno.
- Una rara pieza de encendedor Champ hecho en Japón.
- Un precioso y steampunk Champ modelo Jet Stream.
- Un ejemplar de Champ de fabricación francesa.
- Además de los "modelos estilo Zippo", Champ también fabricó modelos "de tipo IMCO", bajo denominación propia como "Opal". Aquí un curioso Champ "IMCO System": el Champ Opal.
- Un precio Champ modelo Trimlite. Que a pesar de su edad estos encendedores continúen funcionando y prestando servicio, demuestra claramente su durabilidad y robustez.
- Penguin, "el Zippo japonés". Se puede apreciar claramente los numerosos agujeros de aireación de su quemador, algo característico de esta marca.
- Otro Penguin de la Guerra Mundial. Durante el conflicto internacional estos encendedores, robustos y duros, fueron muy utilizados por los soldados. Su funcionamiento a gasolina (disponible bastante fácilmente) los hacían perfectos para tener siempre fuego a mano. Apréciese la leyenda de la parte baja: "encendedor de gran calidad". Los Champ y los Zippo, aparte del número de patente, no solían incluir leyenda alguna.
- Penguin también comenzó a realizar encendedores con diseños peculiares, muy propios de los años 50 en adelante. Tras la contienda mundial, donde el diseño había estado supeditado a la funcionalidad, el conseguir un encendedor llamativo que causara sensación y aportara un toque de distinción a su propietario era una búsqueda común entre los fabricantes de aquellos años.
| Redacción: esRevistas.com / esRevistas.blogspot.com
Me he quedado alucinado con el Champ Opal, la mejor unión austríaca. De hecho me he pedido un IMCO de esos (modelo 6800) a ver qué tal.
ResponderEliminarSí, pero tiene menos gracia porque el quemador no es deslizante. Supongo que los IMCO tampoco lo era.
EliminarEl último Penguin me ha gustado mucho. ¡Muy chulo!
ResponderEliminarY el Champ Trimlite también es curioso. Me gusta.
El Champ Opal creo que lo tuvo mi padre. Ese mechero lo recuerdo por casa, pues compró prácticamente a la vez ese y un IMCO (y si no era IMCO, pues era el fabricado por los chinos, o quizás también de Champ, que estoy en que éste último anda por algún lado escondido, pero a saber dónde, el caso es que no aparece en los sitios lógicos donde debiera estar).