Este post lo vamos a hacer sobre el Brigmton BMI-365, pero serviría igual para cualquier otro patín eléctrico, salvo que algunos de los elementos del mismo serán ligeramente distintos o estarán en otras posiciones del manillar.
Antes de salir con él, como hacemos con nuestra bici, primero deberíamos comprobar que todos los elementos del patín son seguros y están en condiciones. Esto es muy importante, porque por momentos podremos alcanzar grandes velocidades y del buen estado del patín depende nuestra seguridad.
Si lo acabamos de comprar y dispone de freno de disco mecánico, tendremos que comprobar que la rueda de los mismos frenos (sea el trasero, o ambos) gire sin dificultad. Un pequeño roce sobre el disco puede ser admisible ya que, con el uso, la zapata se desgatará. Pero si el roce es mayor, además de malgastar batería nos acompañará en todo el camino un molesto ruido. Por lo tanto, verificaremos con la llave del disco que éste no se desvía hacia ningún lado, para ello haremos girar la rueda con nuestra mano. Ajustaremos donde sea preciso y, si es necesario, con una lija de grado medio (de 280 o similar) iremos "desgastando" mínimamente la zapata, incidiendo con la lija sobre la misma mientras giramos la rueda. Hay que señalar que deberemos tener mucha precaución con esto, para no desgastar la zapata en exceso.
Una vez reglado el disco y la rueda trasera, verificaremos la delantera, asimismo, la tornillería (asegurándonos que ninguna de las ruedas "baile") y los neumáticos.
Pasamos a la plataforma, y en la misma comprobaremos que no hay ninguna zona que se haya despegado, de lo contrario procederemos a pegarla con silicona o con pegamento que no sea agresivo con la goma.
Luego revisaremos el codo de pliegue en la dirección, comprobando que ésta se mantiene en su sitio e incluso sin el seguro, ya que éste podría romperse por el camino y podría producir un accidente. En su caso, aseguraremos el tornillo delantero hasta el punto de que sea fácil actuar sobre el tirador sin dar demasiada poca ni excesiva fuerza. Lo mejor es ajustarlo con el patín desplegado.
Finalmente, comprobaremos que la palanca de freno esté en buenas condiciones, y ajustaremos si es preciso la extensión del cable.
Mencionar que es conveniente tener engrasados ciertos elementos con grasa consistente, para reducir su deterioro y colaborar a su mejor mantenimiento. Estos elementos son, principalmente, el actuador de la palanca de freno (donde va incrustado el cable metálico y donde gira el mecanismo), y los bujes de las ruedas. También en su caso el tornillo o tornillería del caballete de apoyo, y el sistema de plegado en la columna de la dirección.
Deberemos procurar que la grasa no haga contacto ni toque ningún elemento eléctrico.
Finalmente, podremos comprobar, encendiendo el scooter eléctrico, que las luces, el cuadro de instrumentos y la luz de freno funcionen correctamente.
| Redacción: Duraderos.cc / Duraderos.blogspot.com
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