La agenda A6 de Dohe a medio año de uso


A principios de año os hablaba de cómo adquirir agendas anuales notablemente más baratas cuando pasan las fiestas de reyes. Recordaréis también que, si bien usaba el móvil como agenda, este año volvería al método clásico de utilizar una agenda de papel, tras la experiencia de que algunas citas se me habían pasado con el móvil.

Lo que más temía era que me volviera a ocurrir como en los años noventa, cuando adquiría agendas anuales (o dietarios) y tras los primeros meses de uso con la novedad, acabase luego arrinconada.




Estamos en el mes de agosto y puedo decir que eso no ha ocurrido: la agenda en papel ha resultado una decisión muy acertada, no tengo que depender de enchufes ni preocuparme del estado de la batería para utilizarla y, además, puedo tenerla "encendida" todo el tiempo que quiera.

También he podido confirmar el gran acierto que supuso haber elegido el formato A6, en lugar del más convencional A5. Gracias a ello, la agenda es muy manejable y se puede transportar sin problemas.


El único inconveniente que le he encontrado es que los fines de semana estén a media página, y no ocupen una página completa, por lo que en ocasiones se me quedan cortos. Otra genial cualidad de la agenda que he elegido para este año son las tapas duras, que permiten el apoyarse y escribir en la agenda sin necesidad de ningún soporte, y la espiral, que es mucho más cómoda al dar la posibilidad de "voltear" las hojas al completo.

Sobre el estado en general, la agenda ha aguantado muy bien estos seis meses, a pesar de un uso a diario la goma de cierre no se ha estirado, sigue cumpliendo su función perfectamente y su color rojo no se ha apagado. En general el estado es muy bueno, apesar de que este modelo de Dohe no tiene las cubiertas plastificadas y son más proclives a atraer suciedad, y además es más difícil de limpiar.


Para el próximo año sería bueno que en Dohe la mejoraran ofreciendo días de fin de semana a hoja completa, y algunas páginas "extra" interiores (como algún mapa, usos horarios...), y no únicamente la información personal. También me hubiera gustado que ofrecieran la posibilidad de elegir unas tapas a color, sin diseño alguno, y no ese espantoso y horrible diseño de Coca-Cola que llevan las de este año (que, encima, supongo que no les habrá resultado barato poner la marca de esa multinacional). Tampoco estaría de más añadirle unas cubiertas plastificadas, dado que el precio de estas agendas es bastante elevado (para ser, además, unas agendas de tamaño pocket, o sea compactas).

Confío también en que MiquelRius lance algo similar, porque si tengo oportunidad espero repetir el próximo año con una agenda de este tipo, ya que me ha resultado muy útil y enormemente práctica en el día a día.




| Redacción: Duraderos.blogspot.com

2 comentarios :

  1. Me pasa como a ti. Desde que dejé de estudiar, me da miedo una agenda y dejarla de utilizar. Cosa que a ti no te ha ocurrido.

    De momento no he tenido la necesidad, y me conformo con libretas. Sobre todo en tamaño A4, aunque sean delgadas si me las tengo que llevar. En los tamaños pequeños, me acaban molestando las anillas.

    ResponderEliminar
  2. En efecto Guti, es un peligro que como se use mucho el móvil puede acabar ocurriendo.

    La gran mayoría de personas que conozco que usan agenda piensan como tú, y les molesta la espiral. Yo debo ser un caso raro, porque es todo lo contrario: me molestan las que van pegadas, y me siento mucho más cómodo con espirales, en todo, en cuadernos y en agendas.

    ResponderEliminar