La obligatoriedad en algunos países (en otros la alta recomendación), y siempre el aconsejable uso de recurrir a las mascarillas en esta situación de pandemia global, ha hecho que, junto con esas mascarillas, cobren un importante protagonismo uno de sus complementos: el salvaorejas, protector de orejas, o "ajustadores de mascarillas".
Inicialmente era un accesorio para el entorno médico, con el fin que el personal, que se veía obligado a usar mascarilla durante largos turnos de muchas horas (a veces doblando turnos de más de doce horas), no acabase con llagas en la zona interna de las orejas, debido al roce y presión constante de las mascarillas. El salvaorejas es una pieza que libera esa tensión, reduciendo (o eliminando incluso) la necesidad de que la mascarilla se asiente sobre la oreja.