Volvemos al tema de los navegadores. Como ya contamos hace poco, últimamente están bloqueando la mayoría de navegadores antiguos por ser inseguros, los sitios web de todo tipo prefieren que uses las últimas versiones de navegadores web porque, dicen, te aseguran una mejor navegación. ¿Es eso cierto? Claro que no. Y vamos a verlo bastante claro con un ejemplo.
Hace poco recibo un e-mail de tipo pishing en el correo. Se me pedía que accediera a un sitio de Caixa Bank para confirmar mi cuenta. Gmail, que es muy listo, había enviado el correo a spam. Tras abrirlo, me voy a mi viejo navegador web, el Navigator en su versión pre-Firefox, en concreto el Netscape Communicator 4.51 de, nada menos, 1999. Como si fuera un señor totalmente inocente, que no haya actualizado su ordenador ni su navegador y que se fíe de los correos de ese tipo, decido coger la dirección del sitio de delincuencia que se hace pasar por La Caixa, y la introduzco en la barra de direcciones de Navigator. ¿Qué pensáis que ocurre? ¿Que acude a la página web tranquilamente? ¿Que se conecta y me entran todo tipo de troyanos y gusanos?