¿Cuánta compensación se han llevado nuestros anunciantes?



Habitualmente nos contactan firmas de todos los sectores, especialmente dedicadas al marketing y la publicidad, bien sea a través de venta de links (afiliados o por lotes de subastas), como agencias de publicidad. Aunque nuestras tarifas están a la vista, les solemos responder que no es habitual que vendamos espacios publicitarios, sino que los reservamos para marcas y productos que nosotros elegimos expresamente. El ser un medio independiente y totalmente autónomo nos permite disfrutar de ese tipo de privilegios (que pagamos a veces caro, pero esa libertad creemos que merece la pena). Eso quiere decir que las marcas que anunciamos las elegimos nosotros, o dicho de otra manera: para que alguien aparezca anunciado en nuestros medios, tenemos que elegirlo, no sirve que venga tan solo con una oferta bajo el brazo, por suculenta que ésta sea. De manera que a esas firmas de marketing solemos decirles que, si quieren aparecer, contraten publicidad de Adsense en las publicaciones en donde ésta la tenemos (como Revista Coche o Zona Casio).

Así las cosas, hay marcas que se pelean por estar ahí, y obviamente porque saben que les compensa. Aunque muchas de ellas son - y han sido - llevadas al blog por nosotros, de momento no las hemos elegido para anunciarlas (aunque sí les hemos compensado con aparecer en los reportajes, por supuesto).




Y ciertamente les compensa, porque no hay ningún otro medio en la actualidad que ofrezca un sistema parecido. Nadie. La mayoría deberás pagar mensualmente una cantidad no menor (en medios como MyPymes te puede costar más de 700 € por un solo post), y eso no te garantiza siempre que vayas a conseguir el mejor espacio.

Pongamos, por ejemplo, la marca Yumas. Lleva en nuestra cabecera desde 2017, en todo ese tiempo, con 120.000 visualizaciones al mes, haceros una idea de la cantidad de personas que han estado viendo sus zapatillas. Son millones de visualizaciones que, por descontado, casi ningún medio en la actualidad te garantiza semejante retorno de inversión. Lo mismo podríamos decir de Miquel Rius, Hudora, Uni o Varta. Algunas de ellas me consta que no eran conocidas antes de darlas nosotros a anunciar.



¿Y el precio que han pagado por estar ahí? ¿Mil euros? No. ¿Quinientos al menos? ¿El precio de uno de nuestros anuncios? Ni por asomo. En muchos casos solo el precio de unas zapatillas. Nadie, ningún medio actual tiene un sistema así, y menos aún en publicaciones que llevan tantos años en la red (algunas de las nuestras más de 15 años, y Zona Casio acaba de cumplir 10). Pero, como os decía, ese es el privilegio de poder elegir nosotros a los anunciantes. Porque son marcas que, en lo personal, nos han gustado, y por eso las defendemos, las potenciamos, y las publicitamos. Porque merece la pena confiar en ellas, algo muy importante en el complejo y competitivo panorama del mercado de consumo actual, con tanta confusión y rivalidad.

| Redacción: esRevistas.com / esRevistas.blogspot.com




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4 comentarios :

  1. Esa política dice mucho a vuestro favor, demuestra con hechos que buscáis que el anuncio sea relevante para el lector, no el dinero fácil.

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  2. Alejandro28.5.21

    Y si algo se ha notado también durante las épocas de confinamiento más estricto, es como muchas marcas lo que se gastan por un lado en publicidad o en llevarse demasiada producción a China, lo tienen cada vez más flojo en su distribución y que los establecimientos simplemente tengan sus productos o puedan acceder a pedir de su catálogo si el cliente lo desea.

    Hablando de papelería y algo de bellas artes, la cosa es sangrante. Encima de caída de ventas, problemas por la situación a veces en fabricación como en abastecerse de materias primas (o de productos), la distribución de muchos y por tanto la presencia, para el arrastre.

    ¿Os pongo un ejemplo? ¿Os podéis creer que en una gran capital de España, a día de hoy y como nunca ha pasado, en mis papelerías habituales el distribuidor y viajante de Pelikan sea poco menos que como buscar a Wally? Esto poco menos que dicho de charla hace unos meses con el dueño de la papelería comentando de cosas que se apreciaban que estaban pasando... o sea, las librerías y papelerías que es de las cosas que lograron que permitieran abrir, y que han subido la clientela (que yo he visto hasta colas y de bastante gente que sólo recuerdo cuando llegan las épocas de los libros de texto de los colegios), ¡y la distribución de no pocos que si donde venden tradicionalmente es ahí, pues a verlas venir!

    Y ojo, que Uni... también está entre ellas. Pero que no se preocupen, que en lo que ellos han estado en la parra, Pilot, Staedtler, Parker, Milan, Molin, Faber Castell, Edding y hasta Inoxcrom (que aún no es ni la sombra de lo que fue también en eso) han tenido que vender lo que no hay en los escritos. Hasta han empezado a verse otros que apenas se solían ver, y menos en sus escaparates, como Winsor & Newton y Sakura.

    Yo fui interesado (pero sin prisa) por unos tinteros de Pelikan, pues tres previos me los trajeron sin problema en una semana aprox. Satisfecho me decidí al tiempo de pedir uno más, pero el formato grande... y ya salió el tema. Bueno, pendiente está, para cuando esté disponible sobre todo eso, el distribuidor de Pelikan. Pues en otras visitas que hice para algún libro o sin intención de comprar nada en concreto simplemente ver si descubría algo interesante, me dice "mira lo que nos han dejado con otros pedidos, a ver si te interesan" y zasca, tinteros Faber Castell... hombre, no era lo que buscaba, pero ya pues probé (azul real y negro... muy negro por cierto, al azul aún no le encontrado aún una de mis plumas en donde me convenza más que el azul borrable de Parker). Pero a lo que iba, que mientras unos se duermen, otros les cogen el hueco, pero vamos, que a todo trapo.

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    1. De papelería ni me lo menciones, Alejandro. Precisamente alguna que otra marca nos ha pedido que no dijésemos su situación "en público", o directamente han tratado de esquivar la pregunta cuando se lo consultamos. Pero están en todas partes así, hasta Casio las pasa canutas para abastecer a sus tiendas. Unos dicen que es stock, manejo de mercancías, el JIT... Pienso que se ha juntado todo, y claro, eso unido a que los chinos que esclavizaban muchas de ellas (Uni no, pues hace sus productos en Japón, pero da igual, supongo que tampoco es lo mismo) no pueden trabajar codo con codo, pues en lugar de salir diez mil productos al día como hacían antes, ahora logran sacar tres mil y con apuros.

      Y es que esto es mucho más gordo de lo que la gente ve (o quiere ver), pero supongo que mientras Netflix funcione, pues no hay problema.

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    2. Alejandro29.5.21

      JAJA, pensamos igual en lo de Netflix. Yo también pienso que entre lo mal que informaron desde el principio los medios de mayor difusión (televisión en general, no se escapa ninguno) y las modas con las plataformas de Netflix teniendo a la gente en casa y en todos lados tragándose temporadas de series unas tras otras como si fueran Lacasitos o Conguitos, nos la están metiendo doblada, pero ya hasta a la misma industria. Y esta última sin haberse dado ni cuenta, me da la impresión... hasta que ha llegado una situación como ésta que condiciona a la fuerza en cierta medida producción, tiempos de envío y entrega, y la variación puntual de demanda que se pueda dar. Y les ha pillado con todo el tinglado sin plan B.

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