A principios de siglo, Correos editaba un folleto para explicar la transición de las pesetas a los euros y, a la vez, informar de cómo se realizarían esas operaciones en las ventanillas de sus oficinas, agencias y sucursales. Con una redacción somera, fácil de entender y yendo a lo importante, en el folleto se explicaban las fechas de entrada oficial del euro (el 1 de enero de 2002). Había un periodo digamos "de gracia", en el cual ambas monedad coexistirían aunque, en todo momento, el cambio en Correos se daría en euros. Este periodo comprendía el mencionado 1 de enero, y se extendía hasta el 28 de febrero de 2002.
Este documento, que forma ya parte de la historia de Correos, nos informaba también del tipo de cambio, de cómo aplicar el redondeo, y aconsejaba también utilizar todos los sellos ("estampillas") en pesetas antes del mencionado 28 de febrero, tras lo cual dejarían de ser también válidas.