Opinión y prueba de ropa de trabajo Cofra


Dentro de las marcas de equipamiento y vestuario profesional para trabajadores, Cofra es relativamente desconocida en nuestro país. De hecho, cuando me puse en contacto con ellos para estas reviews, aunque amablemente nos respondieron más o menos nos dieron a entender que el mercado español no les importaba demasiado. Es fácil de comprender, en todo caso: en España, por fortuna, existen muchos y muy buenos fabricantes de ropa de trabajo (como Obrerol-Monza) y de calzado (como J'hayber Works), por lo que competir con ellos para una firma extranjera (es italiana) como Cofra es muy difícil.

En Italia no ocurre lo mismo, y de hecho es ese su mercado principal, ya que en Italia los fabricantes de equipamiento para el trabajador son mucho menos numerosos y, por lo tanto, allí la competencia no es tan dura.




El modelo de Cofra que os presentamos hoy corresponde a su cazadora de invierno Cofra Cyclone, una cazadora destinada a las bajas temperaturas, con un corte clásico y bastante convencional.

La he estado probando concienzudamente, antes de dejarla definitivamente aparcada por sus grandes (y graves) defectos, que pasaré a describiros a continuación. Pero antes de entrar en materia, aprovecho para aclarar que con las prendas de Cofra tengáis cuidado, porque al contrario de lo que suele ser habitual en el resto de marcas de ropa para trabajadores, en Cofra el tallaje es escaso por lo que, si debéis adquirir alguna de ésta marca, pidáis un número mayor del que habitualmente uséis. En mi caso no habría habido problema, porque su uso estaba limitado simplemente a probarla, pero si eso le ocurre a un trabajador que tenga que moverse con ella en sus tareas cotidianas, equivocarse de talla con estas prendas puede ser un grave inconveniente ya que, por su acolchado, limita mucho los movimientos si no llevamos una talla algo holgada.


La cazadora de Cofra posee inserciones de refuerzo en codos y en hombros -Cofra dice que solo tiene refuerzos en los codos..., será que no han visto ni su propia cazadora, en fin...-, así como bandas reflectantes en la espalda (3M Scotchlite), en los hombros y en la parte delantera, en los bolsillos (cuya función es nula, por cierto, porque esos reflectantes serán tapados cuando pongamos la mano en los bolsillos, lo que es un detalle bastante indicativo de lo poco que han pensado en la polivalencia y utilidad de la cazadora los que la han diseñado) . En el interior encontramos dos bolsillos con cierre rápido por velcro y, en el exterior, seis (cuatro con ese tipo de cierre y los dos frontales con cremallera), cuatro en la parte superior (dos a los lados con poca utilidad, la verdad, porque además, están inclinados, por lo que si es mejor no guardar nada en ellos, así que podríamos considerarlos dos bolsillos "de adorno").

Está realizada principalmente en poliester, con forro en nylon, con materiales, como veis, de calidad, pero el problema de esta cazadora no es ese. En teoría es una cazadora destinada para resistir las inclemencias del tiempo frío, para cuyo fin dispone de cierre elástico en la parte inferior. Cofra, en lugar de poner ese cierre "como hace todo el mundo" en la parte de la cintura, ha optado por ponerlo en la parte baja, esto trae consigo dos graves consecuencias: una, el frío penetra por el interior al caminar y, la otra, limita mucho los movimientos de las piernas, incluso con un simple caminar despacio. Por lo tanto, sea como fuera pasarás frío, y el cierre no servirá de nada.


El otro inconveniente es el propio corte de la cazadora. En Cofra no debieron pensar en el cuerpo humano, más bien debieron pensar en una columna de ladrillo cuando la diseñaron, porque no es para nada anatómica, da la sensación de que vas metido en una especie de "tubo". Para más complicación, el acolchado, que debía ser útil para aislarnos, nos impide movernos por el propio diseño de la cazadora, en especial cuando tenemos que girar hacia los lados el cuerpo. Unido a eso, y aunque sé que en una cazadora de trabajo esto no debería ser demasiado problema, hace mucho ruido. Es una cazadora que con cualquier movimiento hace un ruido atroz, por lo que si se debe utilizar en ambientes en silencio o no quieres molestar con ella, es mejor que no elijas este tipo de ropa porque no podrás ni sentarte con ella.

Un inconveniente más enorme y grave es el cuello, que es muy corto y apretado, no cumpliendo la función para la que debería servir en este tipo de cazadoras, que sería para sustituir la bufanda. Por supuesto, no estamos diciendo que debería llevar un cuello para cubrirnos hasta la nariz, pero al menos sí que nos protegiese la boca. Además, es un cuello frío, muy poco aislado (sobre todo si usamos la capucha). Dicha capucha, por cierto, está bien acabada y protege de la lluvia con eficiencia pero, como suele ocurrir en los productos de Cofra, siempre hay un lado malo, y esta pieza no lo es menos. El problema es que posee un cierre rápido de plástico, y en la parte frontal un cierre con cinta y topes de plástico bastante ostensoso y sobredimensionado, que nos molestará en los labios y en el mentón y, si lo ponemos hacia abajo, nos rozará contra el cuello, dañándonos en cualquier movimiento que hagamos. Pero un peligro mayor aún es que la capucha nos resta muchísima visibilidad. Su diseño, con una parte superior que hace un extraño "cono", hace que se deslice hacia la cara, y a los pocos minutos acabamos con la capucha en medio del rostro y tapándonos todo el campo de visión, algo gravísimo si el profesional usa esta cazadora en labores peligrosas (por ejemplo, en trabajos forestales). Cierto es que podemos "doblar" la capucha hacia atrás, pero como posee el enganche de plástico, al hacerlo tendremos que superar éste, y entonces nos quedaremos con media cabeza al descubierto. Así, la tesitura es: o no ver, o mojarnos, no hay término medio. Como veis, un enorme defecto.


Lo mejor de la cazadora son sin duda sus cremalleras, YKK, que sí son resistentes y de muy buena factura. Curiosamente, es uno de los pocos elementos en los que no han intervenido la gente de Cofra, así que será por eso.

En resumen: una prenda de trabajo debería ser cómoda y, sobre todo, proteger al trabajador. Obviamente esta prenda de Cofra no lo hace, porque aunque sus materiales estén bien, su nefasto y mal diseño hace que sea la propia prenda la que dañe y moleste al trabajador, y eso no debería tolerarse.













| Redacción: Duraderos.com / Duraderos.blogspot.com

2 comentarios :

  1. Tiene una pinta muy buena. Sabes el precio que ronda?

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  2. Creo que está en torno a los 60 €, pero por ese precio las tienes mucho mejor en multitud de marcas.

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