Bastones y paraguas Carballo

Pocas tiendas quedan que sobrevivan fabricando bastones y paraguas en España. Tras la masificación asiática, con bastones a cinco o diez euros, y paraguas a diez o doce euros, muchos no entienden cómo puede pagarse por un bastón alrededor de cuarenta euros, o en un paraguas más de cincuenta. El secreto no es otro que la calidad. Y, por supuesto, el saber hacer, unos buenos materiales y unos salarios dignos, y no de supervivencia.

Marcas como la italiana Perletti (líder en venta de paraguas en Europa, que remarca a muchísimas firmas del mundo de la moda -de hecho, muy probablemente tu paraguas publicitario de colonia o deporte proceda de ellos-) tuvieron que emitir un comunicado avisando de que en sus productos no participaba mano de obra infantil. Pero qué mas da. Producidos a granel por esclavos en China y el sudeste asiático, sus paraguas tienen precios de risa, aunque otros son mucho más caros porque lo que pagas -irónicamente- es llevar un logo de una marca publicitaria.




Dicho de otro modo: muchas personas desembolsan grandes cantidades de dinero por un mal paraguas, pero con un logo de su marca de coche o de perfume favorita, y sin embargo incomprensiblemente no quieren desembolsar ese mismo dinero por un paraguas que, sin ser de marca, sí sea de calidad y esté hecho en España.

Todo eso ha llevado que de las cientos de empresas que fabricaban paraguas en España apenas queden un puñado. Algunas de ellas (como Ezpeleta, con submarcas como la popular Gotta) han tenido que ceder y trasladar toda su producción a China. Sus paraguas siguen siendo bastante buenos, no obstante, pero aún así la falta de calidad se nota: puños que "se despelan", y precios de risa. Claro, a cambio de pagar sueldos de simple supervivencia. Es el consumismo más atroz en estado puro.

Carballo es una de las pocas fábricas que aún capea el temporal como puede, con productos nacionales y hechos en España que, curiosamente, tienen un gran reconocimiento fuera, pero no aquí. No obstante parte de su catálogo, el más barato, han tenido que ceder y producirlo fuera. Aún así es de las pocas donde puedes adquirir, aún hoy, un paraguas de fabricación española, y teniendo la seguridad de que tiene la calidad de los paraguas de antes. Pocas fábricas pueden decir lo mismo, y aún menos a sus más que competitivos precios (tener un paraguas español por cincuenta euros es altamente competitivo).

Seguramente que muchos, los más "ancianos", recordaréis que, cuando éramos niños, apenas veíamos cambiar a nuestros padres de paraguas. Mi padre tenía dos, que duraron toda mi infancia (y más), hasta que empezaron a ser sustituidos por los paraguas chinos, mucho más baratos, es cierto, pero que a los pocos meses (¡o semanas!) te quedabas sin paraguas. Y de fiarte de un paraguas así con mucha ventisca o tormenta olvídate.

Pero no solo es eso, repito (la resistencia y durabilidad), que también, sino el hecho de que con nuestra compra y nuestro dinero estemos alimentando a una industria asiática sin apenas derechos humanos, con explotación infantil, con sueldos míseros y con poco o nada respeto al medio ambiente. Y, por supuesto, con muy poca pasión en el negocio.


Respecto a los bastones, otro tanto de lo mismo. Carballo es también de las pocas firmas en donde puedes encontrar bastones de calidad y muy duraderos, incluso plegables, hechos en España. El detalle de que vendan aparte el taco o puntera del bastón es un indicio bien claro de la durabilidad de los mismos, que permite que puedas cambiar las piezas de desgaste normal (como la puntera), al contrario que en los productos asiáticos baratos, en donde al quebrarse la puntera tiras a la basura todo el bastón porque ya no merece la pena seguir con él. La puntera no cuesta ni dos euros, lo que resulta evidente y que trae a cuenta -y mucha- adquirir un bastón de estos en lugar de esos baratos que tanto pululan por todo tipo de comercios.

Es a este tipo de empresas a quienes deberíamos defender, porque quedan muy pocas y es meritorio que, tal como están las cosas ahora, alguien pueda seguir apostando por este tipo de productos para poder ofrecérnolos. En el caso de la factoría de paraguas Carballo, con ya más de medio siglo de historia. Si buscas un paraguas como los de antes, ya sabes dónde encontrarlo.

| Redacción: Duraderos.com