Mochila Fjallraven Kanken, lo más rudo para echarte a la espalda


Hace unos años que se pusieron muy de moda las mochilas de vinilo de los suecos de Fjällräven Kanken. Su forma anatómica, su comodidad y, sobre todo, su durabilidad hicieron de estas mochilas un valioso útil para cargar con nuestras cosas de diario. Hoy en día llegan a competir (e incluso a superar) a las famosas mochilas de Eastpak que, como "cuenta la leyenda" (ya que es solo eso, leyenda), como ocurre con los encendedores de Zippo tienen "garantía de por vida".

Lo de "garantía de por vida" es solo un engaño de marketing, lo mismo que nos contaban antes sobre que el tabaco despejaba la garganta o que el azúcar fortalecía los huesos. Huye de "las garantías de por vida" como de la peste, y si alguien te asegura ese tipo de garantías lo único que tendrás garantizado es que no podrás hacer uso de ellas.




De manera que las Fjällräven Kanken compitan con las Eastpak no es ni bueno ni malo, es simplemente que sus fabricantes han conseguido engañar al mismo - o parecido - número de gente.

Cierto que las Fjallraven Kanken poseen una forma que impide que la mochila "se deslice" hacia abajo en la espalda, un diseño que equílibra el peso de la mochila y la hace mas cómoda (y menos dañina para la espalda), pero ese es otro recurso de marketing para bobos ya que, como hemos visto aquí mismo - por ejemplo con las Perona -, hay mochilas en el mercado que mantienen también esa forma y distribución, y no se les da tanto bombo.


Lo malo de las Fjallraven Kanken es que, a su diseño muy abierto y cuadriculado se unen unas asas delgadísimas. Ciertamente son robustas y van muy bien cosidas al cuerpo, pero deslizan para todos lados y es habitual que la mochila acabe torcida en cualquier dirección.

Por si fuera poco, esas asas son muy difíciles de ajustar. Con poca superficie de apoyo el peso se reparte muy mal, cargan mucho los hombros y terminan siendo un incordio.


No son las asas lo peor, en cualquier caso. La mochila de Fjällräven Kanken que hemos probado (la que podría considerarse más común, habitual y estándar, es decir, la más famosa y de tamaño medio), no posee apenas compartimentos, lo que metas en ella hará un "totum revolutum" como si tiraras tus cosas en un saco, sin más y sin orden. Cuando tengas que buscar algo deberás desocupar toda la mochila para encontrarlo.

Cierto que tiene dos estúpidos bolsillos exteriores, pero los calificamos de "estúpidos" porque, básicamente, están de adorno. No tienen cremallera ni sistema de cierre alguno, ni siquiera de protección ante la lluvia, por lo tanto lo que metas en ellos o se te mojará, se terminará estropeando, o te lo robarán. Cierto que podremos poner algún botellín de bebida, pero es que ni para eso sirve, ya que no queda comprimido (no son bolsillos flexibles) y tiene muchas posibilidades de que termine cayéndose al suelo.


El único bolsillo que se salva, y que ciertamente es bueno, es el central exterior, pero es que es el único compartimento útil en toda la mochila, por lo que a todas luces se nos queda muy escaso.

En el colmo de la rudeza, las Fjällräven Kanken ni siquiera están acolchadas. Bueno, sí, en parte: su acolchado es una plancha de esponja plástica desastrosa y que molesta porque la encontrarás en medio de cualquier cosa que introduzcas. Se dice que es así para que la saques y te sientes sobre ella; inaudito. ¿A qué cabeza de chorlito se le ocurrió tal disparate? O sea, que la sacas, la usas para sentarte, y luego toda llena de barro y/o suciedad la vuelves a guardar en la mochila. Gran invento, sí. Eso sin mencionar que para volver a guardarla tendrás que doblarla, si tienes la mochila cargada, con el consiguiente riesgo de que se te rompa.


¿Por qué no confiesan más bien estos de Fjall Raven, que la razón es para evitarse el coste y las molestias de incrustarla en el forro de la mochila, como hacen todos los fabricantes con un poco de inteligencia?

No acaban ahí los desastres de esta chapucera mochila. Si bien el tejido en el que están construidas es duro y las costuras resistentes, siguen recurriendo a clips - botones a presión - o plásticos de pasador para las asas, que son endebles y terminan rompiendo. Puede que el tejido te dure muchos años, por tanto, pero el resto no lo hará.

Un tejido del cual, dicho sea de paso, se queja mucha gente porque suele ser muy proclive a ensuciarse, y el proceso de limpieza es engorroso y delicado.


Pero lo más inaudito es el precio que nos piden: por esta Fjallraven Kanken "normal y corriente" tendremos que pagar 90€. ¡Casi 100 euros por una mochila sin acolchado, sin bolsillos y con asas como tirillas! Increíble también que haya gente que pague ese precio simplemente porque son la moda. Está visto que aquí, como en tantos de estos artículos que se ponen de moda, lo que pagas es la marca, no nos engañemos. Pagas por llevar el logo redondo a la espalda, y por ese trozo de plástico acabas pagando dos o tres veces más que una buena mochila de cualquier otra marca sin tanto bombo. Solo piensa en una cosa: si llevan fabricándose desde 1978, y hasta ahora "no se han descubierto" ni puesto de moda, por algo será, ¿no crees?

En suma: las Fjällräven Kankenn son malas mochilas, muy rústicas, incómodas, muy poco útiles y con un diseño que espanta. Si quieres que los suecos se rían de ti y regalarles tu dinero - si te sobra -, cómprate una. Que, por cierto, de suecas tienen poco: como puedes comprobar, es una mochila asiática - hecha por trabajadores vietnamitas - como otra cualquiera que pudieras encontrar en un bazar chino. Por eso precio, bien podría estar hecha en Suecia o en otro país europeo, al menos. Dudo que en 1978 estuvieran hechas en Vietnam. ¡Cómo nos engaña la publicidad!, ¿verdad?































| Redacción: Duraderos.cc / Duraderos.blogspot.com

3 comentarios :

  1. Muy buena reseña, y crítica, como debería ser. Da que pensar que estas mochilas se vendan a partir de 80€ y esté fabricadas en Vietnam. Puro marketing como ya decís.

    Yo soy usuario de Eastpak desde hace años, fabricadas en China y caras, aunque las compro en ofertas por unos 30€. El caso es que llevo años usándolas, he probado muchas marcas en los últimos 20 años, y las únicas que he conseguido que me duren más de 1 año son las Eastpak. Puede que las FJ también lo hicieran, pero las encuentro incómodas y carísimas.

    La garantía de Eastpak es de 30 años, incluso ellos mismos explican que no puede ser superior puesto que no hay nada que dure para siempre. Eso sí, no la he utilizado nunca, así que no se cuánto de verdad tendrá. Aquí puse mi reseña: Eastpak The Padded Pak’r

    A día de hoy tengo 4 Eastpak que voy alternando, eso me da mochilas para muchos años, aunque no descarto que apareciera un competidor de mejor calidad y más barato y les fuera infieles.

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  2. Jose Carlos12.9.19

    Los suecos han visto que ikea se está forrando vendiendo basura y aprovechando la fama, todos quieren su parte del pastel. Lo vergonzoso es que ni siquiera intentan disfrazar la basura de calidad. De todas formas tampoco lo necesita la gente para pegarse tortas por comprar sus productos. Lo peor de todo, es que si la mochila costara 10€, no la compraría nadie.
    Lo único sueco de calidad, es la novela negra.

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    1. Muy buena reflexión, ciertamente si costase 10 € (son de vinilo, tampoco estamos hablando que sean de kevlar, ni siquiera de nylon) probablemente no tendrían ningún éxito.

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